Es una de las comidas preferidas de grandes y chicos, es una preparación que funciona con todas las comidas; puede ser plato fuerte o acompañamiento, y lo mejor, hacerlas es fácil y económico.
Los siguientes consejos harán que tus papas a la francesa siempre queden deliciosas y crocantes.
- Es muy importante que laves las papas con abundante agua fría, esto remueve el exceso de almidón, así las papas no se pegarán entre ellas, además de que ayuda a que queden crocantes.
- A pesar de lo que se suele creer, es mejor freír las papas en aceite usado, ya que así su cocción toma menos tiempo que con un aceite nuevo; pero cuidado, usa uno con un máximo de tres usos; uno muy reutilizado le daría muy mal sabor a tus papas.
- Sumerge las papas en agua hirviendo y luego mételas al congelador. Una vez estén congeladas, ponlas a freír en abundante aceite, así su interior quedará cremoso, mientras el exterior estará crujiente y dorado.
- Nunca sales las papas antes de freírlas, quedarán blandas. Los mejor es aplicarle la sal, recién sacadas de la sartén, para que se absorba el exceso de aceite.
- Lo mejor es freír por tandas, hacerlo con abundancia enfría el aceite y las papas quedarán blandas.