El cambio de María de los Ángeles a Rocío Dúrcal se da por que su nombre no era apropiado para la carrera que emprendía, así que su manager, Luis Sanz, creyó que el apodo que el abuelo le tenía a María (Rocío) era apropiado para el nombre. En cuanto al apellido, fue una cuestión al azar; Sanz y Rocío buscaron un mapa de España y Rocío señaló sin intención alguna una población llamada Dúrcal.