Lo despidieron del hospital y montó consultorio en la calle para ayudar

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Un médico originario de Brasil fue despedido de su trabajo sin previo aviso, pero eso no fue impedimento para seguir atendiendo a sus pacientes.

Un par de sillas, una mesa de plástico y un enorme corazón dispuesto a ayudar fue todo lo que necesitó el médico para poder brindar ayuda a sus pacientes que esperaban ser atendidos.

El hombre, llamado Rodrigo Ferreira Gomes, decidió no caer en depresión por la mala situación laboral que estaba viviendo.

En una entrevista, realizada por un medio local, él explicó que su vida está al servicio de los demás y un mal momento no le iba a impedir realizar su trabajo.

Su caso fue compartido en redes sociales y tardó poco en viralizarse. Los usuarios explicaron que el médico Ferreira tenía más de seis años en un hospital y que de la noche a la mañana fue despedido sin ningún motivo aparente.