¿Con agua fría o caliente? Esta es la mejor forma de lavar el cabello según dermatólogos
Mantener un cabello saludable exige no escatimar en el cuidado en cada momento, siendo uno de los más críticos el lavado. Esto es lo que recomiendan los profesionales.
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Uno de estos cuidados a tener en cuenta tiene que ver con la temperatura del agua que utilizamos al momento del baño. Dermatólogos y expertos en el cuidado capilar han destacado el rol fundamental que tiene el agua fría o caliente al momento de lavar el cabello, teniendo diferentes consecuencias para el cuero cabelludo.
Es por ello que vale la pena revisar qué diferencia hace el frío o el calor al momento de lavar el cabello y, más importante aún, qué dice al respecto la ciencia dermatológica.
¿Qué hace el agua caliente en el pelo?
El agua caliente puede afectar el cabello más de lo que parece. Según la dermatóloga Elika Hoss, de la Clínica Mayo de Arizona, el cuero cabelludo produce sebo, una sustancia natural que recubre y protege cada hebra capilar. Al lavar el cabello con agua muy caliente, se elimina parte de ese sebo, lo que puede dejar el pelo seco y sin brillo.
Marita Ramos, experta citada por El País de Uruguay, explica que el agua caliente abre la cutícula del cabello, lo que ayuda a limpiarlo a fondo, pero también lo vuelve más frágil, propenso al frizz y a la deshidratación.
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Además, la dermatóloga Elba Naccha advierte que el calor excesivo puede irritar la piel del cuero cabelludo, sobre todo en personas con sensibilidad o condiciones como eczema o psoriasis. Por eso, ducharse con agua muy caliente todos los días no es lo más recomendable.
¿Qué pasa si me pongo agua fría en el cabello?
El agua fría, en cambio, tiene efectos más suaves. Ayuda a cerrar la cutícula del cabello, lo que permite que se mantenga la hidratación y se vea más brillante. También puede reducir la producción de grasa en el cuero cabelludo, lo que es útil para quienes tienen el pelo graso. Según El País de Uruguay, el agua fría tiene un efecto calmante en la piel, ideal para personas con irritación o sensibilidad.
Aunque no limpia tan profundamente como el agua caliente, sí protege mejor la estructura del cabello y evita que se reseque.
¿Es más saludable lavar el cabello con agua fría o caliente?
Los expertos coinciden en que lo mejor es usar agua tibia. Brittany Craiglow, dermatóloga de la Facultad de Medicina de Yale, recomienda duchas cortas con agua templada para cuidar tanto la piel como el cabello.
La dermatóloga Glenda Escalaya, especialista citada por El País, señala que el agua tibia es ideal para cabellos secos, dañados o tratados químicamente, ya que no los expone a temperaturas extremas.