Lorna Cepeda es una de las actrices más famosas de este país. Personajes como el de ‘La celosa’ en ‘Chepe Fortuna’ y ‘Patricia Fernández’ en ‘Yo soy Betty, la fea’ han permitido que se instale en el imaginario colectivo de los televidentes y se gane, además, su cariño.
Pero el éxito y la fama no lo son todo y eso ella lo sabe perfectamente, pues ha atravesado delicadas situaciones de salud. Este fin de semana la actriz apareció en ‘La Red’, donde contó detalles del diagnóstico de cáncer que recibió hace unos años.
Sigue leyendo: Así se tomó Rodrigo Candamil su salida de ‘MasterChef Celebrity’: ¿cuál fue su error?
Según dijo, inició con la aparición de un lunar en la espalda, pero nunca lo sintió. No fue sino hasta que una persona de producción le advirtió de él y esa fecha la tiene grabada en su memoria: “Un compañero de sonido me dijo una vez, en Cartagena, en junio de 2016, ‘oye, algo te está sangrando acá en la espalda'”, pero ella pensó que era la picadura de un mosquito.
Más adelante, en noviembre del mismo año, la niñera de sus hijos la vio cambiándose de ropa y no dudó en decirle: “Qué cosa tan horrible tiene en la espalda”. Acto seguido, Lorna le pidió que le tomara la foto y ahí vio la realidad de lo que estaba pasando: el lunar había crecido, era amorfo y de él salía sangre.
Ver esta publicación en Instagram
Puedes leer: La novela en la que iba a salir Claudia Bahamón antes de ‘MasterChef’: “Soy pésima actriz”
Por supuesto, tras percatarse de lo que le ocurría consultó con un médico, quien desde el primer momento que la atendió le dijo que no le gustaba lo que veía. Luego, cuando le hicieron una biopsia, confirmaron que se trataba de un melanoma, un tipo de cáncer de piel.
Esta difícil situación puso a prueba su fe que, al final, terminó afianzándose. Por tanto, decidió poner en manos de Dios su salud: “Le dije ‘Dios mío, Señor, te entrego esto. (…) Si me dices que me tengo que ir, toma tú la decisión por mí porque tú tomas mejores decisiones y yo sabré que mis hijos estarán bien'”.
Y cierto día, vio cómo se obró el milagro en su vida: “Yo sentí la presión de una mano (en esa zona), era algo muy caliente, y entendí que me estaban curando”. Efectivamente, cuando la iban a operar no había hecho metástasis. En sus palabras, “no tenía nada”.
Su historia de resiliencia además de generar inspiración también se convierte en una señal de alarma para todas las personas, pues con este tipo de enfermedades es esencial actuar desde que se originan para no dejarlas avanzar. En el caso de las mujeres aún más, siendo fundamental el autoexamen para prevenir el cáncer de seno, una de las mayores causas de muerte en el país.
© CARACOL S.A. Todos los derechos reservados.
CARACOL S.A. realiza una reserva expresa de las reproducciones y usos de las obras y otras prestaciones accesibles desde este sitio web a medios de lectura mecánica u otros medios que resulten adecuados.