Compartir la habitación entre parejas es un factor que se ha considerado fundamental para múltiples parejas alrededor del mundo, ya que representa un espacio para compartir, interactuar y hasta para ahorrar espacio y recursos económicos en el hogar.
Sin embargo, cabe resaltar que no todas las parejas se sienten cómodas compartiendo su habitación o cama, ya sea por necesidades especiales de sueño, por privacidad, preferencias puntuales al dormir, o porque la pareja ronca e impide el sueño de la otra persona, aunque esto podría tener solución.
Por ese motivo, aquí le contamos qué dicen los expertos al respecto y si esta tendencia es positiva o negativa para el desarrollo de la relación amorosa.
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Aunque este es un tema que puede tener opiniones divididas, al como lo indica un artículo publicado en el sitio web de la Fundación Nacional del Sueño de Estados Unidos, respaldado por el médico y psiquiatra del sueño, Brandon Peters, a esta conducta se le llama “divorcio por sueño” y puede no ser tan negativo; pues, aunque su nombre podría indicar problemas de pareja, en realidad puede ser una decisión beneficiosa dependiendo de la pareja.
Según indica el experto, esto traería grandes ventajas para la relación de pareja, como la reducción de las interrupciones del sueño, mejora de calidad del sueño, la posibilidad de dormir más tiempo, mejor trato entre la pareja y hasta seguridad, ya que algunas personas realizan movimientos involuntarios mientras duermen que pueden afectar a su acompañante.
A su vez, según una encuesta de la Fundación Nacional del Sueño de Estados Unidos, la mayoría de las parejas que comenzaron a dormir en camas separadas tuvieron una mejor calidad de sueño, así como se puede lograr mayor privacidad en los espacios personales.
Sin embargo, el experto también resalta algunos puntos no tan favorables a considerar antes de tomar la decisión de tener cuartos separados. De acuerdo con el artículo, esta conducta también puede llevar a tener una intimidad reducida, afectar su sensación de seguridad, y aumentar los costos de vida, pues es un espacio adicional para mantener; no obstante, esto puede variar entre las parejas y sus preferencias, por lo que será fundamental tener buena comunicación y llegar a un acuerdo.
De acuerdo con el experto, esta resulta una buena idea cuando el hecho de dormir con su pareja interfiere y afecta significativamente su sueño; pues dormir poco puede conllevar muchos riesgos de salud, así como una peor calidad de vida.
Sin embargo, antes de hacerlo podría considerar otras opciones para solucionar este problema, como la detección de problemas en el sueño y la búsqueda de ayuda profesional, cambiar los horarios de sueño, usar alternativas para dormir mejor, entre otros métodos.
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